viernes, 13 de junio de 2014

FUROSHIKI



El Furoshiki es una técnica japonesa  para envolver, transportar y regalar objetos y, como todo lo que viene de Oriente, resulta fascinante por su simplicidad y eficacia.  Su uso se remonta a los ofuro o baños tradicionales japoneses, donde empezó a usarse para dejar ordenada y no confundir la ropa de cada uno. Su uso se fue extendiendo y los comerciantes lo usaban para proteger sus mercancías. Posteriormente, con el auge de las bolsas de plástico, fue cayendo en desuso y actualmente hay que recurrir a gente mayor para conocer no sólo la técnica sino también su protocolo. Así, cuando alguien visitaba una casa y llevaba un regalo envuelto a la manera furoshiki, debía llevarse la tela consigo después de entregar el presente, ya que normalmente se usaban telas valiosas del ajuar de las mujeres. Si se dejaba en la casa junto con el regalo, el anfitrión estaba obligado a devolvérselo con otro regalo dentro.




Actualmente, se quiere recuperar esta manera de envolver y transportar objetos como alternativa ecológica a las bolsas desechables. Basta con un cuadrado de tela de cualquier tipo, para construirse una bolsa en un abrir y cerrar de ojos, donde guardar libros, botellas, compras o para utilizar como un bolso normal.



Personalmente, me encanta ver el ritual de envolver un regalo o de fabricar un bolso con una simple pieza de tela y unos cuantos nudos con un resultado impecable. Tiene esa clase de “magia” que hace que veamos lo cotidiano bajo una nueva luz. Yo ya he empezado a practicar y es muy divertido, además, te da la oportunidad de establecer una relación más afectiva con los objetos que nos rodean.

Mi primer Furoshiki, hecho con una de nuestras muselinas de bambú, me cabe de todo!